Los cánones de belleza actuales siguen insistiendo muchísimo en la necesidad de estar delgados, perfectamente en nuestra línea, sin un kilo de más. Esto incluso se ha llevado, por épocas, al extremo, bajando del peso ideal y casi demostrando que cuanto más delgados estemos, mejor será para nosotros, cuando esto es una soberana tontería. La extrema delgadez también puede ser algo muy preocupante, como la obesidad, así que no hemos de jugar con este tipo de tendencias, que además nos llevan a poder sufrir trastornos alimenticios como la bulimia y la anorexia. La única fórmula real para poder estar en forma y tener un peso recomendable es comer sano, variado y saludable, y hacer ejercicio para mantenernos en forma y bajar calorías, en caso de necesitarlo. Todo lo demás son trucos, aunque algunos parecen que tienen mucho éxito entre la gente.
Bajar de peso se ha convertido en una obsesión para muchos, y sobre todo para muchas, ya que parece que las mujeres tienen sobre sí una losa especialmente pesada con eso de parecer perfectas en todos los sentidos. La necesidad de bajar de peso hace que en muchas ocasiones, estas mujeres desarrollen una ansiedad brutal a la hora de no comer, de tomar solo ciertos alimentos, buscando estar cada vez más delgadas, y viéndose siempre por encima del peso real que tienen. Es por ello que aparecen infinitas dietas diferentes que supuestamente nos ayudan a mejorar nuestro peso, a estar mejor. Algunas son realmente locas y peligrosas, como ésta que te traemos hoy, sobre los laxantes.
¿Existen laxantes exclusivos para perder peso?
Y es que la efectividad de un laxante para aliviar a las personas estreñidas está más que demostrada. De hecho, éste es su funcionamiento particular, el de conseguir que una persona con este tipo de problema se pueda aliviar. Es cierto que cuando sufrimos de estreñimiento, cuando nuestro cuerpo no evacúa sus heces correctamente, tendemos a sentirnos mucho más llenos e hinchados. Con los laxantes, esto se soluciona así que, ¿por qué no utilizarlos también para adelgazar y conseguir esa sensación perpetua? Existen de hecho laxantes y píldoras que prometen ayudarnos a bajar de peso y a controlar nuestros kilos de más, y se pueden encontrar en tiendas y farmacias. El caso es, ¿son realmente beneficiosos? ¿Cumplen con la ayuda que prometen sin dejar efectos secundarios?
Qué pasa si tomo laxantes para bajar peso
Si te has decidido a probar los laxantes como alternativa para bajar de peso, primero debes saber perfectamente qué es lo que hacen en realidad este tipo de medicamentos. Los laxantes se encargan de lubricar nuestro intestino y favorecer así la expulsión de las heces, especialmente en un estado de estreñimiento que se mantenga durante unos días. Bien, está claro que cuando tomemos estos laxantes para bajar de peso vamos a estar acudiendo al baño bastante más a menudo pero, ¿significa eso que bajaremos de peso? Los expertos aluden a que la sensación de estar más livianos, de sentirnos menos pesados, es natural después de utilizar estos laxantes, pero desde luego no genera una pérdida de peso importante. Es algo más psicológico que otra cosa, y de hecho, como muchas otras soluciones mágicas, puede traer un terrible efecto rebote.
Cuánto tarda un laxante en hacer efecto
Un laxante suele tardar al menos unas horas en hacer efecto, así que tampoco hay que tomarlos con prisa. De hecho, si la intención es bajar de peso, se recomienda tomar tan solo uno por la mañana, o como mucho, dos al día, uno al principio y otro después de comer. La acción se llevará a cabo en nuestro sistema digestivo, que como ya hemos visto se verá ayudado por este tipo de laxantes para poder evacuar todo lo que nos sobra en forma de heces. Esto, sin embargo, también se puede lograr de forma natural con una dieta rica en fibra, que hará prácticamente el mismo efecto, o tomando alimentos y bebidas diuréticas, como el té, que nos ayudará a expulsar igualmente todo eso que nos sobra en nuestro organismo.
Qué pasa si tomo muchos laxantes en un día
El problema de este tipo de “dietas” es que no están recomendadas por ningún profesional y por tanto, somos nosotros mismos los que debemos controlar la cantidad de laxantes que tomamos, según nos parezca. Esto es un verdadero peligro, evidentemente, porque habrá gente que en su carrera loca por bajar de peso se excederá de los dos al día, que para alguien normal incluso puede ser mucho, sobre todo si no sufre de estreñimiento. Estamos forzando a nuestro cuerpo, ayudándole de más, de hecho, y si mantenemos este tipo de dieta por mucho tiempo podremos encontrarnos con problemas graves y efectos secundarios bastante importantes. De hecho, el último estudio sobre el tema relaciona la toma ingente de laxantes con problemas y trastornos de alimentación a los pocos años.
El peligro de tomar laxantes para adelgazar
Ya sean laxantes como tal o pastillas que prometen ayudarnos a adelgazar, este tipo de productos deben ser tomados con pinzas, porque mucha gente piensa que van a tener una función milagrosa, cuando en realidad apenas suponen un cambio importante en nuestra dieta. Ya hemos podido comprobar que estos laxantes tienen efectos secundarios tanto en el corto como en el medio y largo plazo, y pueden llegar a provocarnos trastornos de alimentación, ya que su efecto es más de placebo que otra cosa. Antes de utilizar este tipo de laxantes, lo mejor es intentar una dieta sana y saludable, equilibrada, y en conjunto con un buen entrenamiento de ejercicio físico, la manera más natural y sana de bajar de peso y ponernos de paso en forma. Esto sí que no tiene efectos secundarios, y en lugar de malcriar a nuestro cuerpo, lo estaremos mejorando.